En la foto, un descanso durante la limpieza del Hospital-HSM, en el bar de la esquina.
Quien conoce estas latitudes del barrio de Vegueta sabe que se trata de un "territirio fronterizo", con toda la vitalidad y complejidad etico-estética de estos lugares en "la raya".
Sea lo que sea finalmente el proyecto cultural del HSM, lo que deberá de ser es un puente, un elemento de interacción e interdependencia entre esos dos mundos aparentemente dispares o contradictorios; ya que el arte es la única actividad que se puede mover con la sufiiente libertad y descaro como para operar integración, y al mismo tiempo, estos retos resultan poderosas fuentes de inspiración.
La verdad es que el HSM no podía estar en mejor sitio.
ME ENCANTAN!!!! : ) Movimiento!!!
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